Los slogans que anteceden son para la campaña de un gobierno que batió récords de desocupación, hambre y ahora se suma que en Caleta Olivia ya existe gente en situación de calle.
Con un estado crítico en su salud, duerme en la vía pública y solicita a las autoridades contención social.
Su nombre es Diego Moreno y si bien deambula en la vía pública, durante la última noche, pernoctó en la puerta de ingreso a la municipalidad a la espera que alguien lo pueda atender para recibir su pedido.
Caleta Olivia cada vez se parece más a las grandes urbes como Buenos Aires, Córdoba o Rosario entre otras donde la miseria y el abandono de la población se hacen evidentes en las calles o en los cajeros automáticos u otros lugares que se presten para poder pasar la noche lejos del frío y la inclemencia climática.
El vecino pide ayuda y en su charla con una F.M. local dijo que la gente de Caleta Olivia lo conoce y le agradece por la solidaridad hacia su persona. “Hace 8 años que vengo con esta situación, sólo pido un lugar para acomodarme, no tengo ni cobro nada, mi cuadro es crítico y emocional, detalló.
Diego recuerda que hace 10 días lo vinieron a buscar con una ambulancia y que al estar con custodia policíal no entendía nada. “Mi estado critico es emocional” recalca, y además dice que se siente triste por la pérdida de su mascota a quien prefería alimentarla en lugar de comer él.
Acostado sobre el piso de la vereda en el ingreso al edificio comunal, este hombre tiene una leyenda con un mensaje dirigido al intendente Cotillo, la secretaria de desarrollo social y a los concejales para que lo ayuden con un lugar.
Según comenta en su relato dice que de pequeño, tuvo una “vida de porquería”, porque a los cinco años, su madre lo quiso matar y también le pegaba, en caso de no conseguir “changas”.
Consultado sobre si está preparado para algún trabajo u oficio, Diego dice que es chofer de camiones, y que también tiene experiencia como personal administrativo.
Fuente: La Vanguardia del Sur / Propias.