RIO GALLEGOS: Cuando desde este espacio de libertad que hemos fundado hace 20 años, llamado OPI Santa Cruz, decimos que la clase política en general no representa a la sociedad sino a sus propios intereses partidarios o personales, no nos equivocamos.
Nunca van a ver en nuestro diario un halago, una entronización y muchos menos propaganda de campaña de algún candidato, gobernador, diputado, intendente o concejal, sencillamente porque partimos de la base de la observación empírica de que todos mienten y los que no lo hacen, son muy contadas las excepciones (Dino Zaffrani, Pedro Muñoz…). Si no lo hacen antes, lo harán después, cuando ya están en el cargo y hacen exactamente todo lo contrario de lo que prometieron, con cuatro años (mínimo) de un coseguro político rentado y a plazo fijo.
Y esta conducta inmoral no es la excepción, es la regla.
Una escribanía llamada Concejo Deliberante
El Concejo Deliberante de Río Gallegos, se apresta a aprobar de las manos del intendente Pablo Grasso, un impuestazo descomunal sobre el patentamiento de los vehículos nuevos y aquellos que ya tributan en el municipio capitalino, cuyo valor, Grasso los elevó a más del 240% a partir de su “nueva gestión” el 10 de diciembre 2023.
Después de fracasado el intento de gravar con el 4% el litro de combustible en los surtidores de Río Gallegos, Pablo Grasso envió al Concejo Deliberante un proyecto para poner al impuesto de patente automotor, acorde al valor comercial de cada vehículo, indicando (demagógicamente) que se tomará las valuaciones indicadas en el Registro Nacional de Automotor de acuerdo al valor establecido por la ACARA o en caso contrario, teniendo en cuenta el valor de la factura de compra.
Y establece una escala de afectación del impuesto que va entre el 2 y el 2,5% a rodados (autos y camionetas) que no superen los 8 millones de pesos y del 3% a quienes superen ese valor; es decir, la mayoría de autos y camionetas, dado que no existe hoy en el país un auto 0Km que valga menos de 12 a 15 millones de pesos, aún los más económicos.
Es decir que el impuestazo de Grasso, que todo indica avalarán los concejales de Río Gallegos en la sesión de mañana jueves 21, llegarán a prácticamente todo el parque automotor con el 3% sobre el valor de cada vehículo y que demagógicamente, también, lo presentan como una “tasa diferencial”, cuando sabemos que más de 85% del parque automotor de la ciudad, tiene unidades que superan los 6 u 8 millones de pesos allí considerado.
Los responsables de dar el sí
El Concejo Deliberante de Río Gallegos está conformado por los siguientes ignotos ediles que asumieron con las promesas de “trabajar por la gente” y hoy están “trabajar para Grasso” avalando, aprobando y convalidando una carga ipositiva más sobre los alicaídos bolsillos de los trabajadores que dependen de un vehículo para movilizarse. Ellos son:
Ayrton Ruay Por Santa Cruz, procedente del FPV
Giuliana Tobares SER
Julio Aravena Por Santa Cruz procedente del FPV – Presidente del CD
Daniela D^Amico UCR
Soledad Kamu Sumate Río Gallegos – FPV de Pablo Grasso
Martín Chávez FPV
Victoria Ojeda Por Santa Cruz
De acuerdo a la documentación en nuestro poder, la iniciativa del Intendente salió aprobada de las Comisiones de Legislación General, con la firma de los concejales Kamus, Chávez y Ruay y también desde la Comisión de Presupuesto y Hacienda, con la firma de los ediles Chávez, Tobares y Kamu. Todo indica que mañana, más allá de alguna discusión de oportunidad que alguien dará para dejar sentado su “disconformidad” ante la artera medida que colisiona directamente contra el bolsillo de cada votante y habitante de la ciudad, la norma comenzará a regir para beneplácito del intendente desesperado por hacer caja a pesar de que la ciudad no se priva de pozos, asfalto descalzado, falta de higiene e infraestructura. Mañana, al finalizar la sesión de CD local, daremos los nombres de quienes votaron con Grasso y quienes no lo hicieron contra la gente que dicen “proteger”.
Pero Pablo Grasso sabe que su accionar está protegido desde el Tribunal de Cuentas y también desde el propio oficialismo provincial, con el cual simula un enfrentamiento mediático, pero sabe que el SER, un partido creado en el vientre del Frente Para la Victoria, cerrará acuerdos fundamentales, como éste que mañana aprobarán los concejales de uno y otro partido, en beneficio de su billetera política y a costa de los incautos que los reelegieron.
Esto nos debe ayudar a interpretar las señales políticas demagógicas de ambos bandos, cuando simulan pelearse entre gobernador e intendente, pero, como sucede con los gatos, en realidad, se están reproduciendo. (Agencia OPI Santa Cruz)