Cristina Fernández “preocupada” por YCRT. Tuvo 16 años de gobierno en sus manos para hacer algo, no solo robar y se acuerda a 100 días de haber perdido el poder.

Ayer los medios publicaron una foto donde se muestran los intendentes de Río Turbio, Darío Menna, el de 28 de Noviembre, Aldo Aravena y Pablo González, junto a la condenada Cristina Fernández en el instituto Patria en CABA, resaltando “el apoyo” que ésta última le da a YCRT y expresando que la ex vicepresidente “dio su total apoyo a los mineros, al conjunto de trabajadores de YCRT y a toda la población de Río Turbio y 28 de Noviembre” y para coronar la muestra de cinismo, mentira y lo que fue solo un ensayo político, que empieza a reconstruir fuerzas en Santa Cruz, señala la escueta nota sin contenido ni información valorable, que los intendentes se reunieron con Máximo Kirchner “Para monitorear la actualidad del yacimiento y la megausina, con los fines de elaborar una agenda de trabajo conjunta”, una falacia sin contenido práctico y además un oximorón si Máximo va a elaborar una “agenda de trabajo”.

Todo indica que lo único y real que importa, es la foto reinstalando a la condenada como capitana del armado político de Santa Cruz, pretendiendo reconstruir un núcleo político que se contraponga al SER en las elecciones de medio tiempo en el 2025 y con miras de instalar a Pablo González de cara al 2027.

No es casual la foto de intendentes del PJ en El Calafate y mucho menos aún la vuelta de Pablo González al ruido político de la provincia, un representante directo y edecán político de la ex vicepresidente.

Cara de piedra

Lo relevante de las supuestas declaraciones (sin declarar nada) de Cristina Fernández ante los intendentes de la cuenca, es la poca vergüenza que muestra la señora cuya actuación en la política nacional hundió a YCRT, la vació y la puso en crisis total. A tal punto destrozó su futuro que hoy, no existe el mínimo interés del actual gobierno por sostener un yacimiento altamente deficitario e improductivo, un “regalo” que la propia Cristina Fernández les dejó a los habitantes de la cuenca, que tanto le preocupan hoy a la ex presidente condenada por delitos de corrupción durante sus funciones en el máximo cargo que puede detentar un ciudadano argentino y al cual no le hizo honor a pesar de sus dos periodos seguidos como presidente y el último como vicepresidente a cargo del gobierno monigote de Alberto Fernández.

No hay que tener una pizca de vergüenza para sentarse junto a los intendentes y sacarse una foto como “ordenadora” política de Santa Cruz, porque eso es lo que se refleja detrás de la excusa solidaria con Menna y Aravena, cuando toda la historia negra de YCRT fue creada a imagen y semejanza de Néstor primero y de ella en los años posteriores, periodos donde usaron la empresa para enjuagar negocios de la corrupción, sin importarle nada su subsistencia y simulando inaugurar la usina con la cual ilusionaron falsamente a todos, pero aún así, la señora sigue hablando.
Palabras huecas que le agrega el periodismo adicto, actitudes fingidas, fotos con sonrisas forzadas, no convencen a nadie de aquello que la historia negra reciente de YCRT expone y la muestra claramente como la culpable directa del ocaso del yacimiento y la usina 240 Mw.

CFK tuvo 16 años para torcer la historia y sepultó las esperanzas de Río Turbio y 28 de Noviembre de ser prósperas comunidades con futuro en base al carbón y la energía.

Y hoy, a 100 días de un gobierno distinto y con un pragmatismo atroz, la condenada llora lágrimas de cocodrilo, simulando acompañar el dolor de dos pueblos a los que ella, sus gobiernos y esencialmente sus corruptas administraciones, usaron de base para engañar con las peores prácticas corruptas de las que fueron capaces de aplicar y llevaron a la empresa al doloroso estado en la que se encuentra, que la hace indefendible y le marca un destino incierto. (Agencia OPI Santa Cruz)