MÁXIMO, EL PADRE DE LA DERROTA. QUISO ALINEAR LA TROPA Y SE OLVIDÓ QUE NO SE PARECE AL PADRE, ES UN PROTOTIPEJO DE LA MADRE Y CARECE DEL RESPETO DE TODOS
Y cuando todo estaba encaminado para hacer una extensión de la discusión política sobre el presupuesto 2022, a pesar de las fuertes diferencias existentes entre oficialismo y oposición y dentro de la propia oposición, apareció Máximo Kirchner.
El hijo de Cristina y Néstor, heredó solo los millones de sus padres. No tiene nada del carisma de su padre ni de la perversidad innata de su madre. Es un rejunte de voluntades, sin conocimiento, ejercicio ni sagacidad. Por eso hoy fue el detonante de la antipolítica y nada menos que en el recinto de diputados, donde su amigo y empleado, Sergio Massa, hacía lo posible por contener la reacción explosiva de la oposición por las palabras destempladas de un hombre que cree ser lo que en realidad no es, ni tiene autoridad moral ni real para imponer una decisión de ese tipo.
Tal fue el vuelco de la Cámara que hasta su amigo el diputado Claudio Vidal, quien ya había decidido su voto positivo en la previa, se abstuvo en el último momento. Igualmente los números estaban lejos: 132 votos de la oposición, 121 votos del Frente de Todos y una abstención del SER.
Lo que podría haber sido una discusión extendida, terminó siendo una ruptura terminal. La culpa es de una sola persona y el hombre, padre de la derrota, es quien pretende ser jefe del PJ y conducir una Cámara que le queda grande y no tiene la simpatía, ni el carisma ni el poder, para manejar ni siquiera a su propia tropa.
(Agencia OPI Santa Cruz)