VAMOS AL CLANDE Y TERMINO UNO CON DOS DISPAROS EN EL CUERPO

 Atraparon al hombre que mató a su «amigo» de un disparo: estaba en la casa de su ex pareja

La víctima fue identificada como D. Mardones. Murió desangrado tras un balazo en el abdomen. El asesino es de apellido Cárdenas y, si bien lo detuvieron, no encontraron ni el auto en el que escapó ni el arma que utilizó.

Un hecho de sangre sacudió a la ciudad de Las Heras, cuando se conoció que dos hombres se enfrentaron y uno de ellos murió desangrado tras recibir un disparo en el abdomen.

El hecho se registró en horas de la mañana de este viernes, cerca de las nueve, en plena vía pública y la víctima fue identificada como D. Mardones, un hombre de 32 años que era trabajador petrolero.

Del otro lado está Cárdenas, un delincuente conocido de la ciudad petrolera, hermano de otro hombre que, a fines de julio, había recibido un disparo en una de sus piernas en un confuso episodio que se registró afuera de un local nocturno de la ciudad.

De acuerdo a la información a la que tuvo acceso La Opinión Austral, a través de diversas fuentes consultadas, se pudo reconstruir la previa del suceso, el hecho de sangre en sí y la posterior aprehensión del autor.

Según pudo saber este diario, todo comenzó en la casa de un amigo en común que tenían Cárdenas y Mardones. La misma está emplazada en el pasaje Cruz del Sur al 1200. Se trataba de una fiesta «clandestina» en la que, cerca de las ocho de la mañana, se percataron que ya no quedaba más alcohol.

Ambos protagonistas de esta historia se ofrecieron a ir a comprar más. «No se preocupen, vamos al clande» dijo uno de ellos en relación al lugar donde se harían de más bebidas para continuar con el jolgorio.

Lo cierto es que ambos salieron del domicilio y, luego de un breve intercambio de palabras, Cárdenas sacó una pistola de entre sus pertenencias y disparó contra la humanidad de Mardones. Fueron dos tiros, indicaron fuentes policiales consultadas, uno de ellos -aparentemente- fue mortal y dio en el abdomen.

Mardones quedó tendido en el suelo, mientras que Cárdenas se subió a su Volkswagen Vento y escapó con rumbo desconocido. Los mismos asistentes a la clandestina fueron los que llamaron a las autoridades para dar aviso del hecho de sangre.

La víctima fue trasladada aún con signos vitales al centro asistencial de la ciudad petrolera pero, pese al esfuerzo del cuerpo médico de la guardia, su corazón no resistió y certificaron su deceso minutos después.

En paralelo, el personal de varias áreas de la Policía de Santa Cruz comenzó con el protocolo para estos casos. Mientras Criminalistica realizaba las pericias en el lugar de los hechos, las comisarías Primera y Segunda de la localidad tomaron testimonios de los presentes en la fiesta, para individualizar a la víctima y al victimario.

En este punto surgió una data vital para la causa: cámaras de seguridad de la zona registraron el momento del hecho y, según pudo saber este diario, el registro fílmico da cuenta que no hay otras personas involucradas en el caso más que Mardones y Cárdenas.

Detención

El periplo evasor del homicida duró unas pocas horas. Alrededor de las tres de la tarde, gracias al aporte de un testimonio, los policías lo atraparon. Fuentes consultadas por La Opinión Austral indicaron que el Juzgado de Instrucción emitió una orden de allanamiento en una casa del barrio 1 de Mayo, propiedad de la ex pareja de Cárdenas.

El asesino fue reducido, esposado y trasladado en calidad de detenido a la dependencia policial más cercana. Aunque el caso ya estaría virtualmente resuelto con el homicida tras las rejas, las averiguaciones llevadas adelante por el personal de la Policía de Santa Cruz, ahora están abocadas para encontrar el arma con la que Cárdenas asesinó a Mardones.

De acuerdo a fuentes consultadas por este diario, se supo que, si bien se registró cada recoveco de la casa de la ex pareja de Cárdenas, el arma de fuego no fue hallada. Lo mismo sucedió con el auto en el que escapó. Respecto del Vento, se supo que se libraron las claves 16 y 17 de averiguación de paradero para poder encontrarlo, se presume que el mismo estaría en la localidad pretolera y en su interior estaría la pistola, aunque también podría haber sido descartada por el malviviente.

En la continuidad de la causa, el cuerpo de Mardones fue alojado en la Morgue Judicial a la espera de la realización de la autopsia que podría realizarse en las próximas horas en la localidad de Puerto Deseado. Con esa diligencias se podría establecer efectivamente las causales de fallecimiento de la víctima. (La Opinión Austral)