El obispo García Cuerva fue designado arzobispo de Buenos Aires.

Jorge García Cuerva, actual obispo de Santa Cruz y Tierra del Fuego y de reconocida trayectoria como cura villero, fue designado este viernes por el papa Francisco como reemplazante del cardenal Mario Poli, quien se jubila. Se espera que asuma el sábado 15 de julio.
El papa Francisco designó al actual obispo de Río Gallegos, Jorge García Cuerva, como el nuevo arzobispo de Buenos Aires, en reemplazo del cardenal Mario Poli, quien presentó su renuncia el año pasado al alcanzar el límite de edad de 75 años, según informó el Vaticano.

Garcia Cuerva, de 55 años, quién se desempeña como Obispo de Santa Cruz y Tierra del Fuego se espera que asuma su nuevo cargo el sábado 15 de julio en la arquidiócesis de Buenos Aires, de acuerdo a fuentes del Episcopado argentino citadas por Télam.

El obispo es reconocido como un obispo con amplios conocimientos académicos, así como una profunda participación pastoral, especialmente en el ámbito carcelario, y una destacada trayectoria social en los barrios populares del conurbano bonaerense.

Simultáneamente a su designación, el Vaticano aceptó la renuncia presentada por el cardenal Poli, quien cumplió 75 años el 29 de noviembre de 2022, y lo ha designado administrador apostólico de Buenos Aires con las facultades de arzobispo arquidiocesano hasta que su sucesor tome posesión canónica.

Nacido el 12 de abril de 1968, García Cuerva fue nombrado obispo auxiliar de Lomas de Zamora el 20 de noviembre de 2017 y posteriormente se convirtió en obispo de Río Gallegos a partir del 3 de enero de 2019.

Además, el nuevo arzobispo de Buenos Aires es miembro del Dicasterio para los Obispos desde el 20 de julio de 2021 y comisario Pontificio del Instituto de Derecho Diocesano Miles Christi desde noviembre de 2022.

García Cuerva ingresó a la carrera de Derecho en la Universidad de Buenos Aires en 1986, al mismo tiempo que comenzó a realizar labores misioneras en los barrios populares de El Palito y El Garrote, en la localidad de Tigre.

El 14 de marzo de 1989, ingresó al seminario de la Diócesis de San Isidro y fue ordenado sacerdote el 24 de octubre de 1997 en la Catedral de San Isidro por el entonces obispo Jorge Casaretto.

Durante su formación sacerdotal, llevó a cabo estudios de Filosofía y Teología en el Instituto de San Agustín y obtuvo el título de Bachiller en Teología, así como las siguientes titulaciones de posgrado por la Pontificia Universidad Católica Argentina: Licenciatura en Teología (2003), con especialización en historia de la Iglesia, con la tesis “La Iglesia en Buenos Aires durante la epidemia de fiebre amarilla de 1871?, y Licenciatura en Derecho Canónico (2016), con la tesis “Exequias eclesiásticas y cementerios en el derecho canónico”. Además, obtuvo el título de Abogado por la Universidad Católica de Salta, Argentina, en 2009.

Tras su ordenación sacerdotal en 1997, fue incardinado en la Diócesis de San Isidro, donde inició su ministerio en los barrios populares del conurbano y fue vicario parroquial de la Iglesia Nuestra Señora de la Cava, ubicada en La Cava, localidad de Beccar, una de las mas conocidas villas de emergencia.

En 2006 pasó a ser párroco de la Iglesia Santa Clara de Asís en la localidad de El Talar, partido de Tigre, en los barrios populares San Pablo y Almirante Brown; y en 2014 volvió a La Cava como párroco.

Fue miembro de la Comisión Nacional sobre la Drogodependencia de la Conferencia Episcopal Argentina (hasta el año 2013).En la diócesis de San Isidro fue vicepresidente de Cáritas ( 2012-2017.); asesor de Derecho Canónico (desde 2016); y promotor de Justicia en el Tribunal Interdiocesano de San Isidro-Merlo-Moreno. En el ámbito de la Pastoral Carcelaria, fue capellán de unidades carcelarias en la provincia de Buenos Aires (desde el 2011); delegado diocesano de la Pastoral Penitenciaria (desde 1997); delegado regional de la Pastoral Carcelaria, y representante de América Latina y el Caribe ante la Comisión Internacional de la Pastoral Penitenciaria Católica (ICCPPC) en 2010 y 2017.