Aún con la reserva fría, que se activa cuando hay interrupción del servicio, los cortes no dejan de complicar a Río Gallegos y no hay garantías de que hayan más interrupciones.
Desde el viernes 28 de julio, día en el que hubo un corte de energía prolongado durante seis horas en Río Gallegos, la interrupción del servicio no ha cesado en Río Gallegos.
El gobierno informó que estos desperfectos en las redes se deben al Interconectado, a cargo de Transpa S.A, y que afectaron también a la Cuenca Carbonífera.
Sin embargo, este viernes anunciaron que estaba en funcionamiento la reserva frías, que es el plan b a ante eventualidades. Aun así, los cortes siguen molestando y complicando a la capital provincial, con el adicional de que puede traer (y trajo) consecuencias en los sistema eléctricos de la viviendas y artefactos producto de la subas y bajas de tensión.
No hay garantías (señalado por los propios funcionarios de SPE) no sólo de que no se produzcan más cortes, sino que el mismo día de votación -el 13 de agosto- no se afecte el servicio. El motivo: el clima, según Transpa.