TODO LO QUE DIJIMOS FUE: LA USINA 240 MW SERÁ DUAL PERO FUNCIONARÁ A GAS, YCRT NO PRODUCE Y EL PROBLEMA (PARA LA INTERVENCIÓN) SON LOS GREMIOS.
Esta información surge tras una investigación periodística de la Agencia Opi Santa Cruz que asegura lo siguiente:
Las mayores confirmaciones a las revelaciones que hacemos a lo largo de los años, respecto de la situación del yacimiento Río Turbio y la usina de 240 Mw, las hacen los propios interventores y/o funcionarios de la intervención, quienes en principio niegan todo y más tardes confirman cada uno de nuestros informes y los datos aportados a lo largo del tiempo, especialmente referidos a cuestiones operativas o de inversión, lo cual cimienta y confirma que nuestro trabajo en este aspecto es correcto y nuestras fuentes indubitables.
El Coordinador General de YCRT Ing Eduardo Vilchez fue entrevistado en la radio Fm Tiempo de Río Turbio, en el programa “El grito en el cielo” conducido por el periodista Franco Paz, quien hizo preguntas puntuales y pocas veces respondidas por las autoridades de la empresa y lejos de favorecer el posicionamiento transparente de esta gestión, las preguntas del periodistas pusieron a Vilchez en la necesidad de reconocer cuestiones que siempre hemos dado por hecho e informando extensamente sobre la forma en la cual las sucesivas intervenciones y los sindicatos, han manejado YCRT.
El Ingeniero Vilches reconoció al aire la falta de producción del yacimiento y el déficit que produce, al consumir unos 1.000 millones de pesos mensuales del presupuesto nacional, solo en concepto de sueldos y funcionamiento de la empresa que no produce carbón desde hace más de dos años, teniendo como último recuerdo, la venta de carbón a Brasil con la salida de dos barcos en épocas del gobierno macrista.
Somos los buenos
“No todos los gobiernos son como nosotros”, dijo Vilches, tratando de responderle al conductor, a la pregunta sobre cómo va a seguir la situación institucional de YCRT si continúa sin producir carbón y consumiendo miles de millones de pesos de todos los argentinos, mientras permanece ociosa y altamente deficitaria.
La frase del Coordinador General resume claramente el espíritu del kirchnerismo en materia de sostenimiento de YCRT: es netamente político y de caja. Político, porque el yacimiento es utilizado como herramienta de campaña y de caja, porque constituye un botín para el funcionariato que acomoda su militancia con grandes sueldos, reparte “beneficios” que alcanzan a gente que ni siquiera se ha movido alguna vez de Buenos Aires y genera las condiciones para facturar compras super millonarias las cuales se efectúan por “compulsa de precios” y/o contratación directa, alimentando el circuito de corrupción que jamás se cortó en la empresa emblemática de la corrupción de la década ganada, cuando se asociaba a la UTN y a Isolux Corsán para facturación trucha, licitaciones simuladas e inversiones sobrefacturadas.
Por este motivo, Vilches reconoce en este párrafo, que solo el kirchnerismo es capaz de sostener una empresa deficitaria, con el fin de alimentar el circuito de la corrupción, mientras le otorga a los sindicatos cómplices, todo lo que le pidan, aún a instancias de no trabajar y no producir. Sin embargo, no es que a la Intervención la situación de conflicto planteada por los sindicatos, no la moleste; es que su sentimiento culposo por todo lo que hizo y prometió a los sindicatos, se les vuelve en contra y les ata las manos a la hora de exigirle productividad al personal. Y los sindicatos lo saben y obran en consecuencia.
Vilchez es absolutamente consciente de que solo éste gobierno puede sostener y mantener una empresa ociosa, improductiva y deficitaria, por eso, tal como lo han expresado las fuentes a OPI, en las mesas de acuerdo este tema es puesto en crisis por los negociadores de YCRT, pero no es comprendido por la dirigencia gremial, quienes pretenden empezar a producir, recién cuando les sean restituidos todos los beneficios históricos y desde la empresa les dicen: si no producimos estamos en peligro y el mensaje más claro es: “mientras estemos nosotros, esto será posible, pero si viene otro gobierno no estamos tan seguros de que puedan sobrevivir en estas circunstancias”, lo cual tanto Vilchez como los funcionarios ejecutivos de YCRT saben que de continuar así, YCRT corre una suerte poco deseable: el cierre (lo más difícil y casi imposible que ocurra) o la tercerización, algo que oportunamente fue evaluado por el gobierno de Macri.
¿Y con los chinos, que tal?
En OPI informamos a principio del 2020, que el gobierno evaluaba ceder la explotación de YCRT a los chinos. Las negociaciones en algún momento involucraron la terminación de la usina de 240 Mw, luego no hubo acuerdo, debido a una serie de inconsistencia y condiciones en las conversaciones preliminares previos, que China no aceptó (por el momento), especialmente referidos a la explotación veinteañal y las condiciones de financiamiento.
El carbón para los chinos es fundamental. Son los principales productores y consumidores y Río Turbio, claramente es un yacimiento muy tentador para explotar. Obviamente, si eso ocurriera, las condiciones laborales de quienes hoy mantienen parado en yacimiento, cambiarían radicalmente. Y eso es lo que trató de explicar el Ing Vilchez en su frase, quien a su vez confirmó aquella información que diéramos sobre las tratativas previas con los chinos al decir en la entrevista “China nos ha ofrecido extraerlo (al carbón) ellos mismos…”. ¿Hace falta agregar algo más?.
¿Carbón o gas?
Otro de los temas fundamentales, informados por OPI desde el año 2009, es que la usina de 240 Mw funcionaría a gas; de hecho fuimos los primeros y únicos en publicar las fotos con un enorme gasoducto que llega hasta la puerta del complejo. Desde YCRT y desde la oficina de Julio De Vido, se negó todo. Para “justificar” el enorme caño (como si la opinión pública fuera idiota) se dijo que era para “arrancar las turbinas”, las que luego seguirían a carbón.
Con la pregunta justa y certera de alguien que realmente quiere hablar de las cosas importantes, el colega Franco Paz lo inquirió a Vilchez sobre la forma en que se alimentaría la usina y si realmente sería a carbón o, por lo inestable de la producción, se había decidido hacerla a gas.
El Coordinador se mostró algo sorprendido y tuvo que reconocer que las turbinas se alimentarán de forma dual “Ya existía el plan de hacer el proceso dual a las dos turbinas”, dijo Vilchez aludiendo a una supuesta visión de Néstor Kirchner.
Error: no existe la mínima referencia del ex presidente en todos su mensajes y declaraciones, sobre la posibilidad de hacer una usina dual; por el contrario, siempre resaltó la prosperidad que traería a la cuenca, el insumo de carbón como combustible para la usina de 240 Mw. La alimentación del complejo con carbón, fue el caballito de batalla de NK para fundar su relato desarrollista alrededor del empuje que le daría a la cuenca, la activación del yacimiento.
Lo dicho por el ingeniero, nos lleva a confirmar que como dijimos siempre, la usina funcionará a gas por lo motivos explicados extensamente en nuestros informes. Además, lo que no explica Vilchez, es que la tecnología dual es doblemente más costosa que la dedicada (sea a gas o a carbón). Al no explicar esto, sencillamente confirmó que nunca se pensó en el carbón como combustible único para alimentar la usina.
Luego, como para justificar la existencia de YCRT señaló que la idea es producir 1.200.000 Tn anuales, alimentar la usina y “vender el remanente”. Todo esto, suena a una simple justificación, porque el panorama pitando por el propio funcionario en el programa de radio, es de absoluta incredulidad sobre la eficacia y productividad de YCRT.
Los sindicatos bajo la lupa
En la entrevista Vilchez atacó duramente a los sindicatos que mantienen parado el yacimiento, entendiendo que su dirigencia pide, pero no da nada en su lugar. Desde este punto de vista puso en duda la continuidad de la producción de carbón, debido a las permanentes exigencias de los sindicatos y los paros que realizan por diferentes cuestiones “No todo es pedir, tienen que dar”, dijo Vilchez sobre la actitud extorsiva de ATE y los demás sindicatos que actúan en YCRT.
Criticó a ATE por “prenderse en cuestiones menores” y rechazó la denominación de “Quite de colaboración”, que aplican los gremios a la medida de fuerza, aludiendo que “nadie colabora”, cuando les pagan un sueldo, tras resaltar que YCRT no descuenta de los haberes ni sacan beneficios; sin embargo ayer OPI publicó un Memo interno de YCRT, donde claramente desde la Coordinación General se avisa que los días de paro, serán descontados de los haberes del personal.
Cerrando este tema y dejando en manos de los sindicatos el detenimiento de la producción de carbón, Vilchez dijo “YCRT tiene la capacidad de producir carbón para las 2 turbinas (1.500.000 tn año). Hay que producirlo, está el yacimiento, el personal, los equipos, todo…”, poniendo de esta manera la pelota en la cancha de los gremios, quienes son los que (según Vilchez), trabarían la producción.
Desde ATE a mediados del año 2020 se comenzó a escuchar y leer en el muro de facebook del gremio, las quejas por las inversiones que se hacen en la usina 240 Mw, mientras en YCRT no se invertían ni un mínimo de esos mismo fondos. “Es un mito lo de la inversión de la usina en detrimento de YCRT”, dijo el Coordinador General “Lo que pasa que en la central lo que se invierte se ve. Sale mucho mas caro mantener YCRT que lo que invertimos en la central”, dijo el ingeniero, poniendo en jaque la eficiencia de la inversión presupuestaria en el yacimiento, concluyendo que la “inversión” de la cual hace referencia en YCRT, son los sueldos que se pagan al personal, los premios, la BAE, los pasajes, etc; de acuerdo al razonamiento de Vilchez, (¿?).
El coordinador que no coordina
El conductor Franco Paz, también le preguntó sobre el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) en la usina de 240 Mw, teniendo en cuenta que fue uno de lo puntos más controvertidos del proyecto, ampliamente cubierto por OPI, desnudando las mentiras, los pobres detalles técnicos, las omisiones y la pobreza en el rigor científico. Vilchez demostró que no tiene datos sobre el EIA y se excusó señalando que “no lo tenía a mano”, sin poder dar presiones cuando Paz le preguntó sobre temas puntuales como la disposición de las cenizas y la provisión de piedra caliza. Tampoco le supo decir al conductor, cuándo entrará en servicio la usina. Entre dudas y bromas, Vilchez no pudo concebir una fecha; le echó la culpa al Covid, a Macri y al cometa Halley, pero no asumió la mínima responsabilidad de que no llegan por falta de plan propio.
El depósito de cenizas fue desde el principio un tema que irresuelto, ni siquiera en los papeles pudieron concebirlo. No existe un lugar que pueda almacenar la cantidad de cenizas que (supuestamente) generaría la usina si es que funciona a carbón. Al respecto Vilchez dio un lugar tentativo ubicado en cercanías a las localidades de Río Turbio y 28 de Noviembre y el conductor le cuestionó la voladura de cenizas con los vientos y allí el ingeniero fue un mar de dudas, de cuya explicación no se puede extraer nada valorable sobre lo que está previsto hacer.
Con respecto a la caliza y tal como OPI lo informara en el año 2014, siempre estuvo la opción de acarrearla con camiones, incluyendo empresas de gente conocida sobre la cual caían sospechas de acomodos en un negocio multimillonario cuya especulación partía de los favoritismos que se generaban desde el entonces Ministerio de Planificación de Julio De Vido. En el gobierno de Mauricio Macri, nada cambió al respecto; se sostuvieron las mismas sospechas.
Entre las observaciones que hacíamos en el 2014, estaba la falta de infraestructura vial existente en Santa Cruz, para soportar el tránsito permanente de cientos de camiones mensuales cargados de caliza en tránsito permanente (24/7) desde Chubut y con destino a Río Turbio, lo que pondría al tránsito vial en serio riesgo y la destrucción de las rutas (ya destruidas) como los principales problemas emergentes de esta actividad.
Vilchez habló de la posible explotación de una cantera de caliza en proximidad a El Calafate, pero sin mucha convicción ni seguridad de que sea una opción posible, excepto por la novedad de que se están haciendo los análisis respectivos y luego habló de una explotación con “personal propio”, lo cual implicaría aumentar la planta de personal de YCRT, agravando uno de los principales problemas que tiene el Estado argentino, e incorporar un nuevo sindicato a la empresa: la UOCRA; una organización gremial altamente conflictiva que siempre actúa de “socio” en las empresas y los proyectos estatales, como es el caso de las represas sobre el río Santa Cruz. Solo en ese carácter, la UOCRA deja de lado los conflictos; pero siempre (y solo) asociado a la billetera oficial. (Agencia OPI Santa Cruz)