Un 14 de junio de 2016, a las tres de la mañana, José López, ex secretario de Obras Públicas del kirchnerismo, llegó al convento de General Rodríguez con bolsos que contenían más de 9 millones de dólares.
Ese día, tenía todas las intenciones de ocultarlos, junto con los 153 mil euros, 59 mil pesos, relojes Rolex, joyas tasadas en 452 mil pesos y las armas que también llevaba en su interior. Posteriormente fue descubierto por la policía y detenido.
Y este 8 de diciembre de 2022, seis años más tarde, José López vuelve a relacionarse nuevamente con la comunidad cristiana: se lo vio peregrinando este jueves en la procesión a la Virgen de Güer Aike en Río Gallegos realizando a pie el trayecto de los 30 kilómetros, que tradicionalmente se realiza los 8 de diciembre al celebrarse el Día de la Vírgen.
Su presencia causó un gran asombro en todos los fieles, quienes lo reconocieron de inmediato y lo fotografiaron. El ex funcionario kirchnerista lució ropa deportiva y caminó durante todo el trayecto usando auriculares.

López, que nunca pudo explicar el origen de esos fondos, recibió su primera condena en una causa por corrupción en 2018, cuando fue sentenciado por el Tribunal Oral Federal 1 (TOF 1) a seis años de prisión por el delito de enriquecimiento ilícito.
No obstante, después de media década en prisión por el hecho, le otorgaron libertad condicional. La medida fue ordenada por la Justicia, tras el pago de una fianza de $ 14,5 millones bajo la figura de la libertad condicional.
López había sido investigado en múltiples causas, pero fue condenado a una pena única de siete años de prisión por enriquecimiento ilícito y también por la tenencia de un arma, aquella madrugada en el convento.
En tanto, trascendió que el ex funcionario K estuvo internado en abril pasado en la Clínica Medisur en Río Gallegos como consecuencia de un “ACV leve”, aunque posteriormente con tratamientos y medicamentos, logró recuperarse y recibió el alta médica.